Alimentación para la Memoria

Alimentación para la Memoria

Irene Olalla Lobo
Diplomada en Nutrición Humana y Dietética

Con frecuencia se escucha que somos lo que comemos, pues esto afecta no sólo a nuestra salud física, sino también a nuestras funciones cognitivas.

 

Hay numerosas investigaciones que han demostrado que la alimentación influye en las funciones cognitivas, por lo que es fundamental seguir una alimentación variada y equilibrada de manera constante.

 

En este ámbito podemos encontrar varios nutrientes con especial importancia:

– Carbohidratos: La glucosa es el principal combustible del cerebro, y se debe de aportar en forma de hidratos de carbono complejos (legumbres, cereales integrales, frutas y verduras)

 

– Vitaminas del grupo B (B1, B6 y B12) Son vitaminas que intervienen en el buen funcionamiento del sistema nervioso. (frutos secos, pescado azul, cereales integrales, huevo, …)

 

– Hierro: Es un mineral que interviene en la función y síntesis de los neurotransmisores. (almejas, berberechos, vísceras, germen de trigo, carnes, pescados, legumbres, frutos secos y cereales integrales)

 

– Triptófano: Es un aminoácido esencial que debe ser aportado por la dieta y cuya concentración en plasma y cerebro es directamente proporcional a la concentración de serotonina en cerebro, transmisor que regula los procesos de aprendizaje y memoria. (Huevos, lácteos, pescado, carne, legumbres y frutos secos)

 

– Ácidos grasos esenciales (Omega 3 y 6): Necesarios para el desarrollo y funcionamiento del sistema nervioso. (aceite de semillas, frutos secos, germen de cereales, aguacate, …)

Por lo que en época de exámenes sería interesante evitar el error de comer cualquier cosa, rápidamente, pudiendo optar por su comodidad por comida basura o platos precocinados, ya que este tipo de comida suele llevar asociada digestiones más lentas y pesadas, produciendo somnolencia y dificultad para concentrarse.

 

Planifica y organiza tu comida para mantener un correcto aporte nutritivo que compense el desgaste cognitivo producido durante la época de exámenes.

 

Has varias tomas al día, que no sean muy grandes, facilitarás la digestión y con ello mantendrás mejor la concentración.

Mantente hidratado, preferiblemente con agua, ya que el cerebro está compuesto en un 70% de agua, y la necesita para un buen rendimiento.

Práctica algo de actividad física de manera moderada.